Como utilizar LinkedIn en la selección de personal
Durante el proceso de despedir a un trabajador de tu empresa o negocio, debes tomar la iniciativa en cuanto a cómo controlar o mejorar el ambiente laboral durante los despidos, de esta manera podrás avanzar rápidamente sin dejar efectos secundarios rondando en el lugar de trabajo. Normalmente, es muy difícil para cualquier encargado llevar a cabo el proceso de despidos en el lugar de trabajo puesto que esto influye directamente en la calidad del ambiente laboral.
De ninguna manera y bajo ningún concepto se debe llevar la situación con un aspecto personal sino de manera directiva y concreta, exponiendo las razones y motivos adecuados para llevar a cabo la remoción de alguna de las personas presentes en el grupo de trabajo.
Haz el trato justo
Mediante los acuerdos y tratos debe mantenerse en claro cuáles son las razones y motivos por los cuales se está realizando el despido, para que así, tanto el trabajador como el encargado o contratante estén satisfechos y dispuestos a culminar esta relación laboral, mayormente causada porque ya la persona que ocupa el puesto no está capacitada para encargarse de las necesidades y exigencias que se presentan en el momento. Si los despidos se tornan agresivos o escandalosos, lo mejor es seguir en pie con su decisión y mantener la paz tanto como se pueda para que estas circunstancias no afecten al resto del equipo, puesto que esto podría causar muchos problemas interpersonales y cambios de opinión en aquellos trabajadores que tampoco se encuentran satisfechos
Discreción ante los despidos
De ninguna manera los demás integrante del grupo de trabajo deben enterarse libremente de esta situación por parte de la empresa o el negocio, lo mejor es mantener la mayor discreción posible entre las partes involucradas para que no surjan comentarios o rumores que puedan descolocar o dejar mal parado al negocio o empresa y/o a sus representantes.
Renueva el ambiente laboral luego de los despidos
Estamos conscientes de que ante cualquier situación de despidos, el ambiente laboral se puede tornar un poco tenso o, quizás, hasta sentimental o melancólico, luego de que uno de los integrantes del grupo ya no está presente. Por lo tanto debemos mantener un silencio discreto de manera que podamos continuar con nuestra labor de supervisar el rendimiento de los empleados sin que reflejemos una experiencia no deseada o que sencillamente no funcionó; si tomamos nota de las fallas y causas de los despidos, debemos tenerlas presentes para mejorar el rendimiento de manera que motivemos al resto del grupo a continuar trabajando por sus objetivos, dejando en claro que estos serán bien recompensados.
